Un puñado de amigos y dos cerezas

La monótona y aburrida vida de Cristina sólo se ve interrumpida por las noches, cuando la acosan las pesadillas. Una de ellas se remonta trece años atrás, a la noche que perdió su virginidad a manos del enigmático e irresistible John, del que no ha vuelto a saber nada desde entonces. Y la otra, más reciente, a la ruina económica en que la sumió su socio hace un año, un sinvergüenza sin escrúpulos. Al mismo tiempo, sus amigos organizan un viaje y le ofrecen la oportunidad de volver a reunirse todos, como cuando eran unos adolescentes. Lo que no esperaba, era que después de trece años, John también se uniría a ese viaje. Y, sobre todo, no esperaba que lo hiciera acompañado de su sensual novia. Bastante desanimada se une a ellos. ¿Será una decisión acertada o, como de costumbre, el universo se alineará en su contra? Y mientras intenta deshacerse de su mantra: “La vida es una mierda. Si supiera por qué lo embotellaría y me haría rica”, de disfrutar del anhelado reencuentro, de pasar por alto los métodos poco ortodoxos en los que tanta naturaleza salvaje podrían acabar con su vida, y de no estrangular a la explosiva novia, un peligro se cierne sobre ella y sólo sus amigos y John podrán salvarla.